Teofrasto (en griego antiguo: Θεόφραστος, Theófrastos; Ereso, isla de Lesbos, ca.
Aristóteles le legó a Teofrasto sus escritos y lo designó como sucesor en el Liceo.
Estudió gramática, lenguaje y continuó con el trabajo de Aristóteles sobre la lógica.
Teofrasto realizó extensas observaciones sobre migraciones de plantas y animales, biogeografía, fisiología y su comportamiento, dando un análogo temprano al concepto moderno de un nicho ecológico.
Fue honrado con un funeral público, y la totalidad de la población de Atenas lo honró grandemente, siguiendo el cortejo hasta la tumba, según relata Diógenes Laercio.
Sus escritos difieren probablemente poco del tratamiento Aristotélico de los mismos temas, si bien con detalles suplementarios.
Lo más importante de sus escritos son dos voluminosos tratados botánicos: Estos tratados constituyen la más importante contribución a la ciencia botánica de toda la Antigüedad hasta el Renacimiento.