Jean de La Bruyère

Muchos escritores siguieron el camino estilístico iniciado por La Bruyère: Marivaux, Balzac y Proust, pasando por André Gide.Regresó a París con su familia, la cual atravesaba por una difícil situación económica, y se inscribió en el Colegio de Abogados.Este empleo, en el que sucedió al abad Olivet, le fue concedido por recomendación de Jacques Bénigne Bossuet, "quien proporcionaba normalmente a los príncipes —según Fontenelle— personas de mérito en las letras que ellos necesitaban".En París, editor Etienne Michallet, primer impresor del rey, calle Saint-Jacques, a Imagen Saint-Paul.El nombre del autor no figura en ninguna edición publicada mientras vivió.Aunque la primera edición contenía sobre todo comentarios y casi no hay retratos, su éxito fue inmediato, reeditándose dos veces en ese año sin que La Bruyère tuviera tiempo de ampliarla como deseaba.La novena edición, corregida y revisada por La Bruyére (1696), aparecida pocos días después de su fallecimiento, fue la única que no incluyó nada inédito.Fue atacado violentamente por el periódico Mercure Galant, del que La Bruyére había dicho: "inmediatamente detrás de nada", y cuyos principales redactores, Thomas Corneille y Fontenelle, no le habían perdonado el elogio que, en su discurso, hizo de los líderes del partido de los Ancianos (Bossuet, Boileau, Fontaine) y, sobre todo, el haber exaltado a Racine en demérito de Corneille.La Bruyère consagró sus últimos años a la preparación de una nueva obra: Dialogues sur le Quiétisme, idea que le había suscitado sus frecuentes charlas con Bossuet y que dejó inacabada.Los señores Félix y Fagon, toda la medicina de la corte, acudieron en su ayuda.Nada pudo hacerse… Él me había leído dos días antes los Diálogos que había escrito acerca del quietismo, que no eran, para nada, una imitación de las Lettres Provinciales (él siempre fue original), sino diálogos a su manera.Su muerte, "tan temprana, tan sorprendente", según las palabras de su sucesor en la Academia, el abad Claude Fleury, dio pie a rumores sobre un posible envenenamiento por alguien mencionado en sus Caracteres.De él se dijo que "su humor agrio fue admirablemente utilizado por un estilo incisivo, áspero, nervioso, audaz hasta extremos insospechados.