Butacura (del mapudungún: buta kura ‘piedra grande’) dio su nombre a la comuna de Vitacura.
No hay registros de un cacique llamado Apoquindo en los distintos relatos.
Entre estos pequeños poblados se encontraban Picuncahue, Lo Fontecilla, Tabancura que pasó a llamarse Las Mercedes, Mollecura, Vitacura, Tobalaba.
Cuando el Gobernador ordenó recorrer los poblados cordilleranos que se divisaban desde el cerro Huelén se encontraron varios poblados con rucas de quincha, empalizada embarrada y techo de totora que no sobrepasaban las treinta, cercanas a vertientes (Baños de Apoquindo|Vital Apoquindo) y en medio del tupido y frondoso bosque nativo formado por quillayes, peumos, lumas, pataguas, robles y canelos.
A la llegada de los españoles estas tierras pertenecían al cacique del sector Apoquindo llamado Picuncahue y en ella había gran población indígena.
Restaurantes famosos existen allí como los Correa o el Tip y Tap.