Era la segunda república más grande en extensión (tras la RSFS de Rusia), con 2.717.300 kilómetros cuadrados.
La región se llamó así por el pueblo kazajo, nómadas de lengua túrquica que tuvieron un poderoso Janato en el Asia Central antes de la dominación rusa (véase Kanato Kazajo).
Desempeñó un papel destacado en la construcción del ferrocarril Turkestán-Siberia, que se construyó para abrir la riqueza mineral de Kazajistán.
el flujo de inmigrantes (la mayoría rusos, aunque también otras minorías nacionales deportadas) produjo una mezcla étnica, haciendo que los no kazajos superaran en número a estos.
Otras nacionalidades incluyen a ucranianos, alemanes, bielorrusos, coreanos, y otros.
Fue la última república socialista de la extinta URSS que proclamó su independencia.
Según el censo de 1897, el primer censo realizado en la región, los kazajos constituían el 81,7% de la población total (3.392.751 personas) dentro del territorio del Kazajistán contemporáneo.
La población de rusos en Kazajistán era 454.402, o el 10,95% de la población total; había 79.573 ucranianos (1,91%); 55.984 tártaros (1,34%); 55.815 uigures (1,34%); 29.564 uzbekos (0,7%); 11.911 moldavos (0,28%); 4.888 Dunganos (0,11%); 2.883 turcomanos; 2.613 alemanes; 2.528 baskires; 1.651 judíos; y 1.254 polacos.
Además, se consideró que los bienes necesarios para el cumplimiento de los deberes estatutarios del sindicato y otras organizaciones públicas eran propiedad socialista.
Las tierras ocupadas por granjas colectivas se aprueban para su uso libre e indefinido.
Se construyeron grandes centrales térmicas en Alma-Ata, Karaganda, Ekibastuz, Petropavlovsk, Dzhambul, Chimkent, Yermak, Pavlodar y otras ciudades.
Las empresas de la industria química producían fertilizantes minerales, fósforo, plásticos, caucho sintético, fibras químicas y otros (los principales centros industriales son Karatau, Chimkent, Dzhambul, Guryev).