Prostitución en Francia

[8]​[9]​ Tras el periodo de dominación romana, el monarca visigodo Alarico II (485-507) fue el primer gobernante francés en perseguir la prostitución.

[11]​ Carlomagno fue uno de los gobernantes que intentó suprimir la prostitución, decretando la flagelación (300 latigazos) como castigo en sus capitularios.

Esta medida iba dirigida principalmente al hombre común, ya que los harenes y las concubinas eran habituales entre las clases dirigentes.

A los infractores también se les cortaba el pelo y, en caso de reincidencia, podían ser vendidos como esclavos.

[12]​ Mientras tanto, Luis IX intentó prohibir la prostitución en diciembre de 1254, con desastrosas consecuencias sociales y protestas generalizadas.

[22]​ En 1915, en Le Havre, una encuesta realizada por el Royal Army Medical Corps contabilizó 171 000 visitantes uniformados del ejército británico a los burdeles de una sola calle.

[22]​ La política adoptada por el ejército estadounidense funcionó, con tasas mucho más bajas de enfermedades venéreas entre sus tropas en comparación con los combatientes franceses o británicos y del Dominio.

Sin embargo, tras la firma del armisticio, cuando el ejército estadounidense ya no pudo alegar la necesidad militar como motivo para restringir los permisos, las tasas volvieron a dispararse.

[24]​ Se suponía que los registros de prostitutas debían destruirse, pero la policía conservó los archivos hasta 1960.

[27]​ Sin embargo, la aplicación varió considerablemente a nivel local, aunque la prostitución rara vez figuró en la agenda política durante los años siguientes.

Sin embargo, este último aspecto atrajo pocos fondos y se dejó en gran medida en manos de ONG benéficas.

En 1998 se añadió el turismo sexual si los delitos contra menores eran cometidos por residentes franceses fuera de Francia.

[32]​ Muchas prostitutas empezaron a trabajar en furgonetas, una estrategia que las autoridades intentaron combatir mediante la aplicación de la regulación del aparcamiento.

En los primeros seis meses tras la promulgación de la ley, 249 hombres fueron procesados por comprar actos sexuales.

La vaguedad del lenguaje se debe a que tales medidas siguen siendo controvertidas en el Partido Socialista.

[43]​ Esbozó la estrategia en su libro de 2010 Pour en finir avec les violences faites aux femmes, lo que provocó un gran debate.

[33]​ Las feministas de Estado dominaron el discurso en los años del izquierdista Lionel Jospin, llevando a cabo una campaña contra la violencia machista.

No obstante, hubo voces discrepantes ocasionales, como el debate en Le Nouvel Observateur en 1999, suscitado por la legislación neerlandesa.

[27]​ Al justificar estas medidas, Sarkozy alegó que grandes segmentos de la población estaban expuestos a "ansiedad y exasperación legítima".

[66]​ Además, la nueva legislación permitía que se revoque el permiso a los extranjeros por alterar el orden público, permitiendo que la deportación se convierta en una sanción por captación (activa o pasiva), aunque sean inmigrantes legales.

se afirmó que "nadie elige ser mendigo o prostituto, vivir en barrios sin instalaciones ni servicios públicos".

La judicatura tampoco estaba satisfecha con las pruebas que consistían únicamente en testimonios policiales y se mostraba reacia a condenar.

La Comisión Jurídica del Senado, las Delegaciones para los Derechos de la Mujer en el Senado y la Asamblea Nacional, así como la oposición, hicieron llamamientos para que la política en materia de trata se dirigiera a los traficantes y no a las trabajadoras del sexo.

Así se evitó incomodar a los clientes de clase media, que podrían haber creado más oposición.

Aunque la ley hacía referencia a la protección, la acogida y la reintegración, no había ninguna disposición al respecto, según la ONG Cimade.

[71]​ Al hacer esta distinción, Sarkozy se refirió con frecuencia a la incapacidad de hablar francés, construyendo la cuestión como una defensa del idioma nacional.

En abril de 2006, la senadora Nicole Borvo, perteneciente al Grupo Comunista, Republicano, Ciudadano y Ecologista, intentó presentar un proyecto de ley privado para derogar la ley Sarkozy, argumentando que había sido ineficaz y había convertido a las víctimas en delincuentes.

[77]​ La ministra de Asuntos Sociales, Roselyne Bachelot, apoyó dicha propuesta, declarando: "No existe la prostitución libremente elegida y consentida.

La prostitución callejera está controlada en parte por proxenetas, mientras que otras trabajadoras son prostitutas autónomas.

Procedentes principalmente de Rumania, África y Oriente Medio, son víctimas del tráfico sexual en el país galo.

Prostitución en Europa . En naranja, el modelo neoabolicionista de la prostitución, en el que la venta de servicios es legal pero su compra ilegal, al que pertenece, entre otros países, Francia .
El barrio de Pigalle fue a finales del s. XIX uno de los barrios rojos más destacados de París.
Prostitutas en París durante el período revolucionario, c. 1793–95. Grabado de Jacques-Louis Copia, según Jean-Baptiste Mallet (1759–1835). Biblioteca Nacional de Francia.
Mapa de Francia del origen de las prostitutas en París, publicado por Alexandre Parent du Châtelet en De la Prostitution dans la ville de Paris, considérée sous le rapport de l’hygiène publique, de la morale et de l’administration (1836).
Prostitutas y clientes conversando en el Palais-Royal , en París (1800). Pintura conservada en la Biblioteca Nacional de Francia .
Le Sphinx era un burdel de lujo de París, abierto en 1931 y cerrado en 1946. Se ubicaba en el n.º 31 del bulevar Edgar-Quinet, en el XIV distrito .
Marthe Richard , activista y ex prostituta consiguió que se cerraran gran parte de los burdeles del país tras la Segunda Guerra Mundial.
En su etapa como ministro del Interior francés, Nicolas Sarkozy endureció con la ley que recibe su nombre las condiciones de la prostitución en el país, llevando a que muchas profesionales del sexo se marcharan de las ciudades y del tránsito de las calles a las afueras de las grandes urbes, regresando a polígonos, bosques y carreteras.
Activista de los derechos de las prostitutas, en una manifestación en París en 2005.
La Rue d'Ancin, en Nantes , es considerada un punto rojo de la ciudad, frecuentado por prostitutas al anochecer.
La parisina Rue Saint-Denis ha sido uno de los focos calientes de la capital en cuanto a prostitución callejera.
Esquina y acceso al Bosque de Vincennes , parque ubicado en el este de París , en su XII Distrito .