Primera guerra de los Barones
La Carta Magna de 1215 contenía cláusulas que, en teoría, reducían notablemente el poder del rey.Entró en la capital al poco tiempo, también con poca resistencia, fue recibido abiertamente por los barones rebeldes y los ciudadanos de Londres y proclamado (aunque no coronado) rey en la catedral de San Pablo.Muchos nobles, entre ellos Alejandro II de Escocia, dadas sus posesiones inglesas, se reunieron para rendirle homenaje.También saqueó la catedral, se llevó objetos de valor y los caballos del establo, todo ello como un insulto a Langton.A unos pocos se les permitió salir del castillo, pero Juan ordenó cortarles manos y pies para dar ejemplo.Juan erigió un monumento a los cerdos y una horca con la intención de colgar a toda la guarnición, pero uno de sus capitanes, Savari de Mauléon, lo convenció de que no colgara a los rebeldes, ya que, si Juan colgaba a los que se habían rendido, quizás correría la misma suerte si alguna vez tuviera que rendirse.Solo un hombre fue ahorcado, un joven arquero que había estado antes al servicio de Juan.Se construyó una nueva capilla junto a los apartamentos reales en el patio.La característica más notable fue que se reconstruyó la nueva torre sureste según el diseño defensivo más reciente y con tres cuartas partes redondas para desviar mejor el ataque con proyectiles y los intentos de socavación.Pierre des Roches, obispo de Winchester, y algunos barones se apresuraron a que el joven Enrique fuera coronado como rey de Inglaterra.La Carta revisada fue sellada por el regente del joven rey, William Marshal.Marshal era altamente respetado y pidió a los barones que no culpasen al niño Enrique por los pecados de su padre.Por lo tanto, Marshal prometió que él y los otros regentes reinarían de acuerdo con la Carta Magna.Más aún, se las arregló para conseguir el apoyo del papa, que ya había excomulgado a Luis.Tuvo que luchar durante el camino a la costa meridional contra la resistencia realista en Kent y Sussex, perdió parte de su fuerza en una emboscada en Lewes y el resto fue perseguido hasta Winchelsea.Desde que se hubo pactado una tregua con Dover, la guarnición del castillo había interrumpido varias veces la comunicación con Luis en Francia, por lo que Luis se vio obligado a emprender el viaje de regreso a Dover para iniciar un segundo sitio.El campamento francés instalado en la entrada del castillo de Dover a la espera del nuevo sitio fue atacado y quemado por Guillermo de Cassingham, al igual que la flota que transportaba los refuerzos.