Falanges Libanesas

En 1943, el Líbano se independiza, y el partido es reconocido legalmente en la nueva nación libanesa el 27 de noviembre del mismo año por decreto.

El partido se opondrá tanto al arraigo palestino en suelo libanés como a las actividades de la OLP.

Su fundador, Pierre Gemayel, se presentó a las elecciones parlamentarias en 1951, representando al Partido Falangista por primera vez.

En 1958, al desencadenarse una grave crisis causada por el nacimiento de la RAU y el apoyo dado a ella por los musulmanes, las Falanges Libanesas mostraron un férreo apoyo al gobierno de Camille Chamoun contra la recién creada República.

Bajo la presidencia de Frangieh, las tensiones alcanzaron un punto máximo, en especial tras el Septiembre Negro, en el cual la OLP fue expulsada desde Jordania hacia el Líbano.

Entre 1972 y 1975, el tamaño de las Falanges aumentó hasta tener 85.000 miembros, ya que la comunidad cristiana se sintió amenazada por la presencia armada palestina.

En 1980, por tensiones entre el PNL y las Falanges, Bashir Gemayel ataca Safra, causando la eliminación de la milicia armada Ahrar.

Ese mismo año, las Fuerzas Libanesas aparecen, una unión de todas las organizaciones cristianas en una sola.

Durante los gobiernos falangistas se propicia la ocupación del país por el ejército sirio como modo de acabar la guerra, aunque más adelante esto generaría importantes tensiones internas.

Bashir es sucedido por su primo en las FL, Fadi Frem, aunque este es sustituido por Fouad Abou Nader tras las presiones de Amin.

Aoun pierde este conflicto y se refugia en la embajada francesa, para después exiliarse por unos años.

Al terminar el mandato presidencial de Amin Gemayel, este deja el país, como ya se mencionó.

El sucesor de Saadeh al frente del partido, Munir al-Hajj, intentará una aproximación a Damasco que será fuertemente contestada por los militantes.

Para sucederle compitieron dos candidatos: el antisirio Amin Gemayel, que regresa de su exilio, y el prosirio Karim Pakradouni.

En esta etapa los militantes de las Fuerzas Libanesas muestran una gran actividad y en abril el Ejército sirio se retira.

Como consecuencia, los tres diputados falangistas renunciaron hasta que se resolviese el caso de las explosiones.