Las divisiones político-administrativas del país son las muy diversas entidades subnacionales que juntas conforman los Estados Unidos.
Ciertas ciudades, por ejemplo, se han fusionado con el gobierno de su condado formando así las ciudades-condados consolidados.
En Virginia, las ciudades son totalmente independientes del condado en el que de otro modo serían una parte.
[2][3] Cuatro estados (Massachusetts, Pensilvania, Virginia y Kentucky) se autodenominan commonwealths (mancomunidades).
En este contexto dicho término se refiere a la riqueza común o el bienestar de la población.
Las excepciones son: Alaska, donde las principales subdivisiones son los borough (burgo), en tanto aquellas partes del estado que no están incluidos en ningún borough, llamados borough no organizado, se dividen en "zonas de censo"; y Luisiana, que se divide en unidades denominadas parish (parroquias).
En otros estados, los condados tienen amplios poderes en materia de vivienda, educación, transporte y recreación.
Algunos estados también contienen ciudades independientes que no forman parte de condado alguno.
Estos términos están estrechamente relacionados, tanto así que en muchos documentos históricos ambos se utilizan indistintamente.
Los municipios en los Estados Unidos son por lo general el producto del Sistema de Catastro Público.
Hay aproximadamente 30 000 ciudades incorporadas en los Estados Unidos, con diversos grados de autonomía.
En algunos estados, como Míchigan, las universidades estatales son jurisdicciones constitucionalmente autónomas, dotadas de un estatus especial equivalente a la del municipio metropolitano.
Los residentes del Distrito pueden votar en las elecciones presidenciales y otorgan tres electores en el colegio electoral.
Las áreas insulares corresponden a una serie de territorios bajo la soberanía de los Estados Unidos e incluyen a tres naciones soberanas en libre asociación con los Estados Unidos.
El territorio se dividió posteriormente en cuatro entidades políticas: Islas Marianas del Norte, que se enumeran más arriba, y tres estados libremente asociados con los que Estados Unidos ha pactado el Tratado de Libre Asociación: Los territorios poblados de Puerto Rico, Islas Marianas del Norte, Guam, las Islas Vírgenes de los Estados Unidos y Samoa Americana no votan en las elecciones federales.
Cuba y Filipinas fueron dos antiguos territorios no incorporados que ahora son países independientes.
El gobierno cubano se opone a esta disposición, alegando que Cuba no era verdaderamente soberana en el momento de la firma.
Sin embargo, la corte en estos casos también estableció la doctrina de incorporación territorial.
En virtud del mismo, la constitución solo se aplica plenamente en los territorios incorporados como Alaska y Hawái, mientras que solo se aplica parcialmente en los nuevos territorios no incorporados de Puerto Rico, Guam y las Filipinas.
[10] El consejo de la tribu, y no el gobierno local o federal, por lo general tiene jurisdicción sobre las reservas.
Además, los tribunales estadounidenses han dictaminado que existen áreas más pequeñas que han de ser considerados como gobiernos completamente funcionales, y por lo tanto deben ser obligados por las mismas restricciones impuestas para los organismos "tradicionales" del gobierno.
Proyectada por el arquitecto francés Pierre L'Enfant, a fines del siglo XVIII, fue la primera ciudad especialmente planificada como centro de gobierno.
En consecuencia, en 1789 adoptaron una nueva constitución que establecía una unión federal subordinada a un fuerte gobierno central.