Hermanos Menores Descalzos

Pasados siete años en Italia, volvió a Castilla con tres frailes italianos (Andrea da Perugia, Hilario da Todi y Francesco da Bastía), y fundó el convento de Nuestra Señora de los Ángeles en Sierra Morena, siguiendo el modelo de los eremitorios italianos observantes.Quiso unirse a los franciscanos recoletos y, en 1487, se presentó al capítulo observante de Aquitania, donde fue aceptado.Un año después viajó a Roma y puso su reforma bajo la autoridad directa del ministro general conventual, Francesco da Brescia.En 1499 el papa aprobó los privilegios de la reforma y la autorizó a admitir frailes franciscanos conventuales; en 1502, sin embargo, el vicario observante, con el apoyo de los Reyes Católicos, obtuvo que los descalzos no pudieran recibir nuevos hermanos y que tuvieran que retornar algunos conventos a los observantes: la custodia de los Ángeles fue devuelta a la custodia provincial observante de Santiago.De forma similar, en 1517 el fraile descalzo Juan Pascual, antes que pasar a depender de los observantes se pasó a los hermanos menores conventuales y más tarde obtuvo el permiso del ministro general para recibir en su compañía todos los conventuales que, como él, quisieran seguir un tipo de vida más austero.El decreto pontificio, sin embargo, no tuvo efecto, ya que la mayoría de franciscanos descalzos se contentó con tener un procurador general en Roma y otro en Madrid.En 1621 obtuvieron de Gregorio XV un vicario general casi independiente, con derecho definitorio en capítulo.Tres años después, Urbano VIII intentó en vano anular estas concesiones, pero en 1642 uniformó todas las provincias descalzas con unas constituciones propias diferentes a las observantes.La reforma descalza o alcantarina se propagó para toda España, Portugal, América, Filipinas y en el Reino de Nápoles (desde 1589), bajo dominio español, además de fundar una casa en la Toscana y otra en Londres.En 1703 tuvieron un procurador general propio, que fue elegido, por turnos, entre los descalzos y los franciscanos recoletos.Como el resto de ramas observantes, fue suprimida en 1897 por León XIII, pasando sus miembros y conventos a formar, con los franciscanos observantes, los recoletos y los reformados, la Orden de hermanos menores.