Antaño no existía esa divisoria administrativa creada en el siglo XIX y las tierras de uno otro lado formaban una estrecha unidad.
En toda la merindad no se había formado ninguna villa con jurisdicción sobre[5] aldeas, aunque existe el poblamiento disperso.
Su territorio se sitúa en ambas vertientes de la cordillera Cantábrica vertiendo sus aguas al mar Cantábrico los ríos Deva, Nansa, Saja y Besaya; y en la cuenca del Duero los ríos Carrión y Pisuerga Al sur de la cordillera en la Montaña Palentina se integraban 54 entidades de población y 2 barrios, estos últimos hoy despoblados.
La comarca se caracteriza por un poblamiento disperso en pequeños barrios agrupados en concejos y estos en valles que son sus actuales municipios.
Esta merindad pasa a integrar el partido de Campos, junto con las merindades menores de Liébana, Saldaña, Monzón, Campos, Infantado y Cerrato.