Es la persecución de homosexuales más grave en la historia neerlandesa y, según el historiador Louis Crompton, la más grave anterior a la persecución realizada por los nazis.
[1] Sin embargo, tras la Paz de Utrecht en 1713, el país comenzó su decadencia militar y política.
En 1730 y 1731, tras las quejas del sacristán de la catedral, el gobierno ordenó una investigación.
Wilsma conocía bien los círculos de sodomitas en diversas ciudades, identificando a 140 hombres.
[3] A la extensión de la histeria también colaboraron artistas gráficos realizando grabados sobre el tema.
Poco después, la histeria persecutoria tomó niveles desconocidos en Europa extendiéndose a ciudades menores como Delft, Groninga, Heusden, Kampen, Leeuwarden, Middelburg, Naarden, Ryswyk, Schieland (Beverwijk), Utrecht, Vianen, Voorburg, Woerden, Zutphen y Zwolle.
[6] La histeria llegó a su paroxismo en el pueblo de Faan (Groninga), donde fue exacerbado por rivalidades políticas.
Los dos niños nombraron a 18 hombres de entre 15 y 20 años con los que afirmaban haber realizado juegos eróticos; en mayo se había detenido a 6 granjeros, cuatro partidarios de Clant; finalmente se acusó a 36 hombres, muchos de los cuales confesaron bajo «torturas insoportables».
[8] El escándalo tuvo un eco en los periódicos de Francia, Inglaterra, Irlanda y Alemania, e incluso llegó a ser comentado en las colonias americanas.
[5] La exposición pública del pecado nefando produjo una modificación en la percepción de la sodomía.