Hallazgos arqueológicos encontrados en el área de Zwolle indican que ya había una tribu Isala viviendo alrededor en aquella zona en 1500 a. C..
Zwolle se fundó en una montaña entre los tres ríos que rodean la ciudad, IJssel, Vecht y Zwarte Water.
Antiguos documentos hablan de una iglesia dedicada a San Miguel Arcángel.
Esta iglesia, la Grote o Sint Michaëlskerk, fue reconstruida a medianos del siglo XV y aún perdura.
La iglesia contiene un púlpito esculpido, trabajo de Adam Straes van Weilborch (hacia 1620), otras buenas esculturas y el órgano (1721).
Las autoridades locales contaron el dinero con sus manos y sus dedos se quedaron azules fruto del roce con el cobre.
Es posible visitarla y contemplar desde ella una magnífica vista de Zwolle, ya que es el punto más alto del casco urbano.
Los parques no faltan en esta ciudad tampoco, incluso cuenta con varios lagos con playas artificiales montadas en ellos, perfectamente preparadas para barbacoas y otras actividades al aire libre.
Las panaderías y otros pequeños establecimientos alimenticios y/o familiares no suelen abrir los domingos.
Los festivos suelen cerrar la mayoría de los establecimientos aunque algunas cadenas comerciales abren parcialmente.
En el exterior del casco antiguo existe también una sala de conciertos donde hay actividades casi diarias.