María Francisca de Neira

Hija y heredera del impresor Francisco Antonio de Neira, fallecido en 1716.Tres años después se casa con el impresor Alfonso Burguete al que encomienda la gestión del negocio familiar.En ese mismo año cede el taller a su yerno Martín José de Rada mientras que ella se queda con la librería.Nacida en Pamplona en 1701, hija primogénita del impresor Francisco Antonio de Neira y de Juana María Romeo, en 1719, con 18 años, cuando hace tres años que su padre ha fallecido, se casa con el también impresor y librero Alfonso Burguete al que aporta una importante dote y al que su madre, viuda, encomienda la gestión del negocio familiar.[3]​ A partir de esa fecha no se tiene noticias suyas.El novio, a su vez, aporta al matrimonio cien pesos en “especie de libros”.[5]​ Por otra parte, concede doscientos ducados a cada uno de los tres hijos restantes.La situación se hizo insostenible y, al final, la madre exigió al matrimonio que abandonara su casa y dejara el negocio antes del 11 de septiembre de 1749.Como es habitual, el editor abona a cuenta distintas cantidades, pero en 1751 todavía quedan pendientes 628 reales, cuando la impresión habría costado 1.422.[20]​ Izuriaga, un hombre intelectualmente inquieto, encomienda otros trabajos al taller, como la impresión, en 1745, del periódico el Correo verídico o Mercurio.Únicamente se ha de reseñar que entre 1748 y 1750 no se conocen publicaciones suscritas por la viuda de Burguete, lo cual no quiere decir que el taller estuviera inactivo sino que los trabajos salían firmados por Martín José Rada, el encargado del mismo desde 1746, a raíz de su boda con Josefa Burguete.La adscripción religiosa de los autores aparece repartida: tres títulos están firmados por jesuitas, otros tantos por clérigos regulares, dos por carmelitas; además, figuran un mercedario y un franciscano.En un conjunto dominado por los libros religiosos, el castellano viene representar dos terceras partes de las obras editadas.Se trata de la primera obra en euskera editada en Pamplona en el siglo XVIII; a lo largo de esta centuria se han contabilizado 28 obras en este idioma, todas ellas dedicadas a la formación espiritual del pueblo vascoparlante.Siete años más tarde, en 1751, presentará en el Consejo Real, junto con los impresores Miguel Antonio Domech y Francisco Picart, un recurso contra el monopolio concedido a José Ezquerro para imprimir los hechos ajustados y cédulas en derecho de los pleitos.
Cirugía completa de Carlos Musitano (Tomo I), traducida por el "cirujano" Martín José de Izuriaga, impresa en Pamplona, en el taller de la viuda de Alfonso Buguete, en 1741