Las "lozas trianeras" aparecen con frecuencia en el ajuar doméstico que recogen algunos maestros de la pintura española, como Velázquez, Murillo o Zurbarán.[1][2] Originales de la España musulmana, se extendieron luego por la península ibérica y el Mediterráneo occidental.Se ha documentado asimismo, entre los siglos décimo y duodécimo, la técnica específica estannífera que da como resultado el característico vidriado blanco.En la lechosa loza trianera el adorno más habitual lo proporciona el pincel azul, introducido en la cerámica andalusí en el siglo XIII.Refiriéndose a estas vasillas el erudito Covarrubias las describe en 1610 como "cantarilla con algo de salitre" que, resudando, consigue mantener el agua fresca.
Bartolomé Esteban Murillo:
Vieja comiendo gachas con un chico y un perro
, medio tapada por el
capazo
puede verse una
jarra
de loza trianera con pico vertedor, en
vidriado estannifero blanco
sobre el que resalta la decoración vegetal verdiazulada hecha con un barniz de
cobalto
.