Andújar

Su término municipal está dividido por el Guadalquivir, quedando al norte el parque natural de la Sierra de Andújar perteneciente a Sierra Morena y al sur la vega y campiña.

A los ciudadanos de Andújar se les ha conocido como iliturgitanos,[3]​[4]​ al menos desde el siglo XVI, y ello a pesar de que, según estudios arqueológicos realizados en la zona, la actual Andújar no se ubica en el asentamiento de la primitiva Iliturgi.

No es algo extraño en los gentilicios hispanos: casos como este se pueden observar por toda la geografía española.

[cita requerida] El extenso término municipal de Andújar cuenta con dos zonas bien diferenciadas: Sierra Morena y la campiña del Guadalquivir.

Todo indica que fue una ciudad floreciente al abrigo de la producción y comercialización de la cerámica romana altoimperial (siglos I-II) por antonomasia, la terra sigillata, actividad ayudada por su espléndida situación junto a la primera vía fluvial en importancia de la Provincia Baetica a la que da nombre.

Inmerso en la dinámica general de ruralización del mundo urbano, a partir de época bajoimperial hasta la Antigüedad Tardía (siglos III-IV) sobrevivirá aún algunos años y aparecerá mencionada entre las ciudades del reino visigodo como Sturgi.

La población que allí aún vivía posiblemente se trasladó a una localización cercana (en la actual Andújar), con una buena situación, donde ya con anterioridad existió probablemente un pequeño asentamiento rural ibero-romano.

Desde los inicios de la Guerra Civil, Andújar quedó sitiada en el lado republicano.

El capitán Cortés fue acusado de utilizar como escudo humano a los civiles refugiados en el interior del Santuario, pero los republicanos exigían la rendición de todos o ninguno.

La represión adquirió tintes dramáticos en Andújar, con un total de 93 fusilados oficiales en el cementerio municipal.

La calle del Hoyo fue otro de los escenarios más violentos, con una treintena de muertos, al igual que la Hacienda La Cubana, donde se cometieron verdaderas atrocidades y donde desaparecieron cuerpos que nunca fueron encontrados.

Las fuerzas franquistas también juzgaron sumariamente a muchos acusados, que fueron ejecutados en el cementerio de Andújar.

La cifra de los 93 fusilados debió ser más elevada teniendo en cuenta las que no fueron registradas en los documentos oficiales.

Otros 18 fueron ajusticiados en la capital jienense corriendo la misma suerte que los condenados a muerte de Andújar.

Faltaría por sumar 22 muertes sospechosas de presos en el hospital del pueblo.

La resistencia política en los núcleos urbanos de la provincia no desaparecería hasta 1948.

Las víctimas eran jornaleros, panaderos, albañiles, ferroviarios, chóferes, ceramistas, carpinteros o agricultores.

Al menos dos fosas, situadas en el muro norte del antiguo cementerio, los recogen a día de hoy.

También tiene una importante actividad alfarera, que se remonta hasta hace más de 2000 años.

La actividad económica de Andújar a finales del siglo XX y principios del XXI se centra en el pequeño comercio, al igual que grandes superficies comerciales nacionales y foráneas empiezan a colonizar áreas de nueva urbanización para satisfacer las demandas consumistas de la población.

La desaparición de un potente y constante tejido industrial da lugar en los primeros años del siglo XXI a un floreciente sector de la construcción que emplea a numerosos trabajadores, ya sea para participar en las nuevas edificaciones locales o en las obras residenciales y públicas que irán surgiendo sin parangón alguno por toda la geografía española en ese tiempo.

Para las carnes procedentes de la caza mayor, el clásico condimento es el adobo, al que cada cocinero/a procura imprimir su sello personal.

Puente Romano de la Ciudad de Andújar
Puente romano de Andújar
Andujar - 019 (30621663032)
Iglesia de San Miguel
Ayuntamiento de Andújar
Andújar desde su parque natural
Ayuntamiento de Andújar
Fachada del Palacio de los Niños de Don Gome
Romería de la Virgen de la Cabeza
Nuevo Estadio Municipal