Lerín

A ambos lados del río los aluviones se escalonan en diversos niveles de terrazas fluviales.

En el término municipal no queda gran cosa de la cubierta vegetal originaria, únicamente quedan pinares de repoblación (pino carrasco), algún pino silvestre, y choperas a lo largo del río.

Lerín cuenta con un clima mediterráneo continental subárido, caracterizado por tener unos inviernos fríos y unos veranos cálidos, las lluvias son escasas e irregulares.

La villa se convirtió en el centro de las posesiones beaumontesas (Sesma, Cirauqui, Eslava y Sada).

Desde el castillo de Lerín se organizaron levantamientos frente a Juan II, por lo que sufrió varios asedios e importantes daños (1469).

Durante los reinados de Francisco Febo y Catalina y Juan de Albret, continuaron los levantamientos beaumonteses, por lo que se buscó la mediación pacificadora del rey de Castilla, el cual se comprometió a alejar al conde rebelde, pero para llevar a cabo su misión las tropas castellanas ocuparon las posesiones beaumontesas, entre ellas Lerín.

No tardó mucho en reanudar los conflictos, por este motivo Lerín fue asediado, y tomado en 1507, incorporándose a la Corona.

Con la incorporación del reino a la Corona de Castilla, se le restituyeron al conde todas sus posesiones.

Debido a su orografía era especialmente apto para la defensa, por este motivo sufrió las guerras del siglo XIX.

Durante las guerras carlistas sirvió de fortaleza a los liberales, y el pueblo sufrió daños.

Años después, y en el lugar donde cayó abatido, su familia mandó colocar un monumento conmemorativo que aún se conserva en un estado bastante aceptable.

[1]​[2]​ Durante la segunda mitad del siglo XIX la villa tuvo un desarrollo espectacular.

En cambio la superficie dedicada al cultivo de la vid ha sufrido un importante retroceso a lo largo del siglo XX.

En la plaza destaca la iglesia y la casa parroquial, edificio barroco del siglo XVIII.

La villa estuvo defendida en la Edad Media por un castillo del que no quedan vestigios.

Fue construida en 1927 por Víctor Eusa, en un solar sobre el que estuvo la iglesia del convento de Capuchinos.

El exterior del templo está construido en sillería, donde se aprecian con claridad las diferentes fases constructivas.

Lerín constituye un caso singular en la organería hispana, probablemente no haya otro pueblo en todo España que tenga 12 organeros que durante los siglos XVII y XVIII trabajaran por todo el país.

Lerín en Historia de España en el siglo XIX
Iglesia de Santa María de la Asunción