Más allá del límite del bosque las inadecuadas condiciones ecológicas no permiten el crecimiento, ya sea por las temperaturas frías, la falta de presión de aire, la falta de humedad o las condiciones del suelo.
Si es causada por el viento, se conoce como formación krummholz (del alemán krumm (curvado, torcido) y Holz, (madera): krummholz, «madera retorcida»).
La línea arbolada, como muchas otras líneas naturales (los límites de un lago, por ejemplo), aparece bien definida desde la distancia, pero en un reconocimiento lo suficientemente cercano, se trata de una transición gradual: los árboles crecen más bajos en dirección a la zona más inhóspita hasta que simplemente dejan de crecer.
Además, en algunos lugares tropicales o islas, la carencia del acceso biogeográfico a las especies que se han desarrollado en un ambiente subalpino, puede dar lugar a líneas arboladas más bajas de lo que se puede esperar por el clima solamente.
Sin embargo, estas condiciones no se relacionan directamente con la línea arbolada antártica, sino que se relacionan con la exposición que tienen.