[4][3] Sus señoríos y posesiones entonces pasaron a Juana, su hermana mayor, que junto con su otra hermana, Isabel, eran las únicas descendientes de Juan Núñez de Lara.
[3] Mientras que viviera Juana, Tello sería señor consorte de Vizcaya y Lara.
[5] Durante la Guerra de los Dos Pedros Juana, que se encontraba en Aguilar de Campoo, fue hecha prisionera en 1358 por su cuñado Pedro I de Castilla[6] y ejecutada en Sevilla en 1359.
Entonces Enrique de Trastámara, cuñado de Juana de Lara, envió sus tropas a Nájera en abril pero fue derrotado y debió refugiarse en Francia, para iniciar así la primera guerra civil castellana, con la consecuente muerte del rey y la instauración de la Casa de Trastámara en la Corona de Castilla.
Tras el asesinato de su esposa Tello de Castilla conservó el señorío de Vizcaya hasta su muerte en 1370 y en su testamento entregó el señorío de Vizcaya a su hermano Enrique, quedando así incorporado el señorío en la Corona.