Juan Cruz Ruiz de Cabañas

Poco después de ordenarse sacerdote se dedicó a la enseñanza.[2]​ Una vez instalado en la Catedral de Guadalajara comenzó su labor por la educación fundando varias escuelas en su diócesis.En 1803 encargó al arquitecto Manuel Tolsá la elaboración de los planos y en 1804 la construcción a José Gutiérrez.[3]​ Simpatizó con la Compañía de Jesús, sin embargo dadas las circunstancias imperantes en España y en la Nueva España, no pudo conseguir el restablecimiento de la orden en Guadalajara.Sin embargo, gracias a la intervención de Correa se le permitió escapar, pues este se opuso firmemente a que los rebeldes continuaran la persecución del lujoso carruaje.