Durante un tiempo residió en Buenos Aires, donde fue el abogado defensor del primer juez sometido a juicio político en la Argentina.
En definitiva, Cáceres fue derrotado y el general Emilio Mitre intervino la provincia, llamando a nuevas elecciones, en que sólo participaron los partidarios de su hermano Bartolomé Mitre, que acababa de dejar la presidencia.
Hizo un gobierno de partido, con algunas obras públicas y muchos anuncios institucionales.
Realizó el censo nacional en su provincia e inauguró el Colegio Nacional de Corrientes, para reemplazar al Colegio Argentino, que no se abría desde la invasión paraguaya.
Permaneció en Corrientes, donde se dedicó a la carrera judicial: fue juez y más tarde presidente del Superior Tribunal de Justicia provincial.