Participó en la batalla de Arroyo Grande y se retiró con el general Fructuoso Rivera a Montevideo.
Allí defendió la ciudad durante el sitio que le impuso Manuel Oribe.
En 1855 fue destinado al fuerte Azul para preparar una ofensiva contra los caciques Catriel y Cachul, que finalmente no tuvo mayor éxito.
Su mayor éxito lo consiguió al derrotar una ofensiva paraguaya en la batalla de Boquerón.
[4] Tras el final de la guerra, fue puesto al mando del ejército nacional contra la rebelión jordanista.
Fue reemplazado por el general Gelly, que logró derrotar a López Jordán tras muchos meses de lucha.