Manuel Isidoro Suárez
En el primer choque de ambas caballerías “con sables y espadas”, la del general Miller fue avasallada.Una vez reunidos sus hombres, apuró el paso y esperó nuevamente a la caballería realista al mando de José Canterac.Isidoro Suárez la dejó ir y luego que el Mayor peruano, José Andrés Rázuri, le comunicó una falsa orden de cargar a la caballería realista, Suárez ordenó el ataque; de improviso la caballería realista se vio atacada por su flanco descuidado y se desconcertó.Al darse cuenta de este hecho los de la caballería del ejército unido libertador que se encontraba en fuga, empezaron a reagruparse y volver al ataque.Acusado de intentar derrocar a Bolívar, junto con otros muchos oficiales argentinos, fue arrestado y expulsado del Perú.Regresó a Buenos Aires en 1827, y por orden del presidente Bernardino Rivadavia fue puesto al mando de un regimiento de lanceros, con el que puso sitio a Colonia, aún en manos brasileñas.Apoyó las revoluciones de Fructuoso Rivera contra el presidente Manuel Oribe, pero no llegó a combatir en ninguna batalla.Fue obligado a refugiarse en la ciudad, donde participó en la defensa contra el sitio que le impuso Oribe.