El brigadier Arenales ordenó seguir al coronel, dejando 220 En esos momentos, San Martín ordenó a Arenales dirigirse a Jauja para apoyar su ofensiva, pero el brigadier le propuso no dividir su división y pasar por los pueblos para animar la rebelión de los indígenas locales.
El general aceptó el plan y realizó un movimiento para fingir amenazar Lima por Cañete.
Nueve días antes, Arenales salía de Ica y para el 31 ocupaba Huamanga, también organizaba una retaguardia en Ica a las órdenes del teniente coronel Francisco Bermúdez y el mayor José Félix Aldao.
La guarnición, compuesta por 13 a 26 defensores, fue sorprendida, muriendo el centinela y siendo capturados 7 realistas.
[14][15][16][nota 1] Entre tanto, San Martín había traslado sus posiciones a Huaura el 12 de noviembre.
[2][3] El diplomático español Mariano Torrente creía que, después de sumar las partidas sueltas de Jauja, Tarma, Huancavelica e Izcuchaca, la división debía 1.500 a 2.000 hombres según los planes del virrey, pero en la práctica eran superados cuatro a uno por sus enemigos.
[6] El militar argentino Segundo Roca decía que solamente el batallón Victoria sumaba más de 1.000 plazas y tenía 2 cañones como respaldo.
[49] A las 10:00,[49] la derecha patriota (batallón N°2) atacó al trote la izquierda monárquica, rompiendo fuego a medio tiro de fusil y cubierta por el humo asalto la posición, forzando la defensa en un estrecho istmo de terreno escabroso rodeado por dos lagunas.
[47][50][51] Sin embargo, el principal ataque fue contra el centro realista, ahí la izquierda patriota (batallón n°11) cruzó el barranco bajo fuego de la artillería enemiga.
Los realistas intentaron defenderse formando un cuadrado, pero tuvieron que retirarse en desorden al pueblo, donde se desbandaron.
[47][54][55] En esos momentos el teniente Vicente Suárez dio alcance con sus jinetes al coronel Santa Cruz y su escuadrón, que se batían en retirada.
[7] Las columnas patriotas atravesaron el pueblo y se reunieron al norte, sin dejar de perseguir a sus enemigos.
También se capturaron 2 cañones con sus pertrechos, la bandera del batallón Victoria, los estandartes de caballería, 350 fusiles, parque y la caja militar.
[61] Al parecer, el brigadier realista logró escapar con 2 lanceros en un comienzo, pero poco después fue alcanzado por el teniente Suárez.
[64] La victoria fue importante, pues permitió a los independentistas reabrir las comunicaciones entre Arenales y San Martín y le dio impulso a la rebelión en Huancayo, aunque está sería aplastada poco después.