Iglesia castrense de Barcelona

[3]​ En su interior, la torre de San Juan servía de prisión y la acompañaban diversas edificaciones para el acuartelamiento, entre las que destacaban el arsenal, la capilla y el palacio del gobernador.

[4]​ Con el tiempo la Ciudadela se convirtió en un símbolo de represión y en ella fueron ajusticiados numerosos presos políticos, especialmente durante la ocupación napoleónica y durante el gobierno absolutista de Fernando VII.

[8]​ Con posterioridad al proyecto frustrado del panteón, hubo varios proyectos de reconvertir la iglesia en diversos equipamientos, como una biblioteca, una hemeroteca, un Archivo Municipal o un Museo de Arte Litúrgico.

[11]​ Las obras estuvieron dirigidas por el ingeniero jefe Alexandre de Rez y fueron ejecutadas por un contratista local, Pere Bertran i Tap.

Por otro lado, la torre-campanario situada como apéndice del ábside, en el eje longitudinal, se inspiraba en modelos franceses de la misma época.

[2]​ La iglesia presenta una nave única con ábside semicircular, transepto con cúpula ovalada sobre el crucero y testero semicircular, con una puerta flanqueada por pilastras que sostienen un frontón y un rosetón en la parte superior.

Edificios de la fortaleza de la Ciudadela en 1870, en pleno proceso de derribo. En la parte centro-derecha se aprecia la iglesia
La iglesia en 1888
La iglesia en 1921, foto de Josep Salvany
Interior de la iglesia
Fachada principal
Perspectiva desde la plaza de Armas de la Ciudadela, con la escultura Desconsuelo de Josep Llimona