Las primeros registros de Huy se remontan a un castro romano con un fuerte localizado en la parte derecha del río Mosa.
En la última parte del siglo XVII las guerras de Luis XIV causaron repetidos ataques a la ciudad hasta llegar al punto que los propios habitantes frustrados desmantelaron su propio castillo, que tantos problemas les había causado, en 1715.
Esta fue una posición estratégica de defensa durante las dos guerras mundiales.
El siglo XIX fue una época de gran prosperidad basada en la industria del papel aunque se notó demasiado el descenso de la industria pesada en el siglo XX.
Desde entonces las autoridades decidieron en agradecimiento a la Virgen que se repitiese la procesión cada siete años.