Hembrismo es un neologismo en español utilizado con distintas acepciones,[1][2][3][4][5][6] entre las cuales, puede funcionar como sinónimo de misandria o desprecio y aversión al sexo masculino,[7][8] otras veces se define como discriminación sexual contra los hombres,[9] e incluso para referirse a sesgos de género que perjudican a los mismos en acciones u opiniones.
[12][13][14] Algunos autores afirman que en ocasiones, en varios colectivos feministas existen actitudes de desprecio y rechazo al género masculino[15][16][7][17][18][19] que podrían describirse como hembrismo, siendo un ejemplo de sexismo y suponiendo una actitud contraria a la naturaleza igualitaria del feminismo.
[20] En contraparte, según algunas posturas feministas, el uso del término hembrismo se trataría de un concepto machista que habría aparecido supuestamente para desprestigiar y ridiculizar al movimiento.
Sin embargo, la literatura académica más reciente, ha indicado que ambos conceptos no serían iguales.
[49] La escritora María Elena Simón Rodríguez también considera equivocado el uso del término como sinónimo de feminismo radical.