Ha sido considerado «el arquitecto [madrileño] más característico y representativo del último tercio de siglo».
[1] En el plano político fue diputado, senador y alcalde de Madrid.
Su obra experimentó una evolución desde un estilo inicial denominado como «italianizante» y con «tendencias clasicistas»[12] a una etapa de madurez en la que cultivó una arquitectura caracterizada por un goticismo neomedieval y el historicismo.
[11] Tras un anteproyecto del propio Cubas, del que algunos de sus elementos han sido calificados como «anodinos» o «poco afortunados», terminó proponiendo un diseño con una «mejor asimilación de la arquitectura gótica» y «mayor rigor histórico», según Navascués Palacio,[27] que se correspondía con el de una «magnífica» catedral neogótica según la moda imperante en Europa, influido por el arquitecto francés Viollet-le-Duc.
[18][28][29] Dicho proyecto resultaría luego muy modificado: las obras se fueron alargando por problemas económicos[11] y finalmente se prosiguieron según líneas del neoclasicismo, más acordes con el vecino Palacio Real.