La propiedad, que pertenecía a la familia Urquijo, consta de dos inmuebles uno principal que da a la calle de Serrano y fue construido en 1920 y el segundo denominado Villa andalouse por su estilo neocolonial decó y próximo a la calle de López de Hoyos, fue proyectado en 1928 por Luis Gutiérrez Soto y construido en 1930.
Es un edificio en esquina que no se ciñe al perímetro de la manzana característica del Ensanche, sino que se ha concebido retranqueado en su parte frontal con el fin de resaltar su fachada y así ganar espacio para un jardín.
También se han retranqueado las medianerías con objeto de conseguir que la luz natural incida en todas sus fachadas.
[2] Según consta en el proyecto original, se emplearon los mejores materiales que había en Madrid para la construcción de este edificio de tres plantas.
Es precisamente esta mezcla de estilos lo que confiere a este palacio cierto carácter eclecticista.