El Peruano
Constaba de cuatro páginas, su suscripción anual valía seis pesos y salía todos los sábados.[7][8][9] Fue precisamente en mayo de 1826, que el Ministerio de Gobierno lo declaró diario oficial y mandó que se insertaren en él los avisos y documentos relativos a la administración pública.Pero debido a que este último salía de manera irregular y las normas no entraban en vigencia cuando era necesario, El Peruano empezó a publicar las disposiciones legales desde el 15 de noviembre de 1826, en la sección «Parte Oficial», y con el tiempo suplantó al Registro Oficial en dicha función.[2] Ello ocurrió al instalarse el gobierno provisorio del mariscal Agustín Gamarra, que fue el punto de partida de la llamada Restauración o la reestructuración del Estado peruano.Un avance importante para El Peruano se dio bajo dirección del polígrafo Manuel Atanasio Fuentes.Incrementó su tamaño, insertando datos estadísticos, crónicas locales, nacionales y extranjeras, entre otros artículos.[2][7] Terminada la guerra, se restituyó la publicación de El Peruano, al principio semanalmente y luego tres veces por semana.Pero al finalizar la década, el periódico empezó a cambiar de local constantemente.[7] En 1941 se dio la Ley N.º 9311, que reorganizó El Peruano y mandó «se publiquen en él todos los avisos que tengan carácter oficial, sin cuyo requisito carecerían de valor legal».El periódico amplió su tamaño y tiraje, y en 1950 ocupó un nuevo local: la quinta cuadra del jirón Quilca, en el centro histórico de Lima, sede que posee hasta hoy.Una edición especial similar apareció en 1969, conmemorando el primer año del gobierno de Juan Velasco Alvarado.Este creó mediante la Ley N.º 21 420 de 1976 la empresa Editora Perú, juntando bajo una misma dirección los diarios El Peruano, La Crónica y La Tercera.En marzo de 2002 se lanza el suplemento Identidades relacionado con la cultura peruana.Este autor ha anunciado también un trabajo más amplio que enfoque toda la trayectoria de El Peruano.