Por meras razones cronológicas se le podría adscribir a la Generación del 98.
Con 21 años, Consuelo Álvarez Pool se casó con Bernardo Azcárate en Trubia, Asturias.
Pensando en la emancipación económica solicita examinarse para ingresar en el cuerpo de Telégrafos.
Ingresó en el Negociado Internacional, pues Consuelo Álvarez dominaba varios idiomas y su perfil se ajustaba al puesto.
En este año también consiguieron plaza Clara Campoamor y su hija Esther Azcaráte Álvarez.
[3][14] Consuelo Álvarez, Violeta, consideraba necesario escribir para contar las miserias que veía a su alrededor.
Tuvo una amplia actividad social, participando o fundando diferentes asociaciones: Feminista y defensora del acceso de las mujeres a la educación con el fin de obtener una formación amplia, que les permitiera conseguir la independencia económica suficiente para no tener que considerar el matrimonio como el medio indispensable para la subsistencia.
[23] En esta lucha no estaba sola, había más mujeres como Carmen de Burgos, Colombine, y su propia hija Esther Azcárate Álvarez.
[26] Su actividad política fue intensa, siendo candidata por Madrid a las elecciones de 1931 por el Partido Republicano Demócrata Federal, pero no salió elegida.
[3] Defendía igual que su compañera Clara Campoamor (Partido Radical) el derecho al voto femenino.
[27][28] En 1907, el partido Republicano Democrático Federal al que pertenecía Violeta, se había comprometido con ella a presentar una proposición de Ley a favor del voto para las mujeres, pero no fue hasta 1908 que el diputado Francisco Pi y Arsuaga, jefe del Partido Republicano Democrático Federal, presentó una enmienda ante el Congreso para que las mujeres mayores de 25 años pudieran votar en las elecciones municipales.
Consuelo Álvarez Pool, Violeta, desarrolló una amplia e intensa labor periodística, tanto en prensa escrita como en radio.