Chile jugaría 4 amistosos, 1 de ellos ante Argentina, donde perdió por 2-1 en Viña del Mar,[3] otro ante México, donde ganó 1-0 en la misma ciudad,[4] y luego se trasladó a Montevideo para jugar otro amistoso ante Uruguay, empatando 2-2, donde los goles chilenos fueron marcados por Gerardo Cortés,[5] y finalmente cerrando su gira ante Estados Unidos, perdiendo 2-1 en Nueva York.
De principio a fin, la selección fue amplia dominadora del encuentro y con ello se quedó con la victoria.
la selección hacía su juego pero los africanos se plantarían muy bien en la cancha y no dejarían que los dirigidos de José Sulantay llegaran al arco contrario.
Así se fueron al breve descanso, y ya en el segundo tiempo de la prórroga, la selección barrió con su rival.
Mathías Vidangossy es derribado en el área de sentencia y el árbitro decreta penal que luego lo canjea por gol Mauricio Isla.
El escenario del compromiso era nuevamente Toronto y la Sub-20 confiaba en torcer la mano a la historia e instalar a Chile por primera vez en la final de una Copa del Mundo, pero ese sueño comenzó a trastabillar cuando la albiceleste marcó el primer gol y, de paso, rompió el invicto que tenía Christopher Toselli, quien, de todos modos, superó la marca que tenía Cláudio Taffarel desde 1985.
En el segundo tiempo, la albiceleste llegaba con más daño al arco nacional y eso sumado al paupérrimo arbitraje hace que Argentina marque el segundo gol, lo que deja a una Sub-20 casi sin chances de poder remontar el marcador.
Arturo Vidal se fabrica un penal más el árbitro no ve falta y en el contragolpe Argentina liquida el partido.
El que simbolizó toda la ira, rabia y frustración fue Arturo Vidal quien estaba al borde del llanto.
Después del partido tuvo un grave incidente con la policía canadiense en el que fueron detenidos 8 jugadores a los que se trató de manera brutal y descarada: un par de horas después los jugadores fueron liberados y la policía no presentó cargos en su contra.