Ello supone que es la cervecera española con más cervezas distintas en el mercado.Sus planes de negocio actuales pretenden doblar esta cifra hasta alcanzar el 4% en 2018.Este grupo de empresarios becaron al ingeniero Antonio Mayandía para que viajara al país germano a conocer las fábricas teutonas, y a su vuelta levantó los primeros edificios de la cervecera aragonesa.El producto se transportaba desde la fábrica a los establecimientos de ventas en carros arrastrados por caballerías.Estaba formada por doce percherones que arrastraban galeras, volquetes y coches de paseo.Como producto complementario, la fábrica elaboraba y distribuía barras de hielo.El registro de las jaulas no impedía que muchas veces llegaran incompletas a su destino.Las barras pesaban 25 kilos cada una, y se vendían por mitades o cuartos.En verano, envueltas en sacos de arpillera y arrastradas con garfios, se distribuían incluso en los domicilios particulares, por lo que la oferta no daba abasto con la demanda.En la capital aragonesa abundaban este tipo de establecimientos, que han desaparecido en su mayoría.Posteriormente se puso en marcha el aparato llamado “Inspector”, automatismo de reducido tamaño que revisa las botellas antes del llenado.En 1998 obtuvo la certificación de calidad ISO 9001, convirtiéndose en la primera cervecera española en conseguirla.[7] En 2020, tras el confinamiento por la pandemia de COVID-19 y debido a una alta demanda de cerveza, deciden poner en marcha su tienda en línea, que destaca y consigue superar en visitas a sus competidores directos.La Zaragozana lleva más de treinta años exportando y en su trayectoria ha alcanzado algunos hitos en el sector cervecero español.El que fuera una cerveza sin nada de alcohol, la primera con estas características elaborada en España, y ser entonces la marca líder en ese segmento, facilitó su introducción.UU. y se convierte así en la primera marca española comercializada en este país.En 1997, la prestigiosa guía australiana Mark Shields incluye a Ámbar entre los mejores “sabores extranjeros” del mundo.Ese mismo año, las dos mayores cadenas de alimentación inglesas, Sainsbury y Tesco, comienzan a comercializar Ámbar en sus establecimientos.UU., Australia, Japón, Singapur, Inglaterra, Francia, Italia, Andorra, Suiza, Canadá, Portugal, Kuwait, México o Libia, entre otros.