Carbono-14

El carbono-14, 14C o radiocarbono es un isótopo radiactivo del carbono cuyo núcleo contiene 6 protones y 8 neutrones.

[2]​ Los rayos cósmicos de alta energía (principalmente protones) que proceden de fuera del sistema solar impactan con átomos presentes en la alta atmósfera de la Tierra, principalmente nitrógeno y oxígeno, haciendo que se desintegren en partículas subatómicas, como protones y neutrones.

Los neutrones así producidos, al alcanzar altitudes entre 15 y 9 km de la superficie terrestre, y en latitudes geomagnéticas altas, colisionan con los átomos de nitrógeno originando las denominadas reacciones (n,p): 147N + n → 146C + p El carbono-14 también puede ser producido por rayos en las tormentas, pero en cantidades insignificantes a nivel mundial, en comparación con la producción por rayos cósmicos.

[3]​ Por ello, los ensayos de bombas nucleares llevados a cabo por varios países sobre todo en los años 1950 y 1960 aumentaron extraordinariamente la cantidad de carbono-14 en la atmósfera y posteriormente en la biosfera.

Ahora bien, tras la muerte de un organismo vivo no se incorporan nuevos átomos de 14C a los tejidos, y la concentración del isótopo va decreciendo conforme va transformándose en 14N por decaimiento radiactivo.

Así puede ser datado el momento de la muerte del organismo correspondiente.

Esta escala equivale a los años transcurridos desde la muerte del ejemplar hasta el año 1950 de nuestro calendario.

Se elige esta fecha por convenio y porque en la segunda mitad del siglo XX los ensayos nucleares provocaron aumentos drásticos de la concentración de 14C en la atmósfera.

Variación relativa de la concentración de carbono-14 (arriba) y carbono-13 (abajo) en la atmósfera desde 1850.