Tras este combate, la guarnición austriaca de Landau se rindió a los franceses.
El general de Tallard no esperó a que el enemigo pasase al ataque: le ordenó al marqués Armand de Pracontal que volviera desde Saarbrücken por Essingen.
Tallard mandó atacar por el flanco izquierdo a 14 batallones y consiguió abrir las líneas enemigas.
Entretanto, el conde Jean-Ernest de Nassau-Weilburg logró lanzar su caballería y destruir los escuadrones enemigos: Pracontal encontró la muerte en ese enfrentamiento.
Luego la infantería francesa entró en contacto con la caballería del elector palatino, que terminó replegándose a su alrededor.