Las fuerzas germanas se dividieron en dos columnas comandadas una por Bucçlin y otra por Lotario.
Bucçlin colocó a su ejército en una formación conocida como cabeza de jabalí (cuña) en el centro, con unidades escalonadas hacia atrás en ambas alas de manera que la formación se asemejaba a una V invertida.
Consistía en caballería bizantina pesada muy acorazada, también tenían arqueros, lanzadores de jabalinas y honderos.
Narsés dispuso una línea defensiva con un frente muy dilatado compuesta por infantes y caballería desmontada.
En el flanco izquierdo, la caballería se escondió en un bosque con órdenes de salir a luchar sólo cuando el enemigo entrara en combate.
Bucçlin y la mayoría de sus hombres murieron, mientras que las bajas romanas fueron pequeñas.
Agatías da la cifra increíblemente baja de 80 víctimas bizantinas, si bien afirma que sólo sobrevivieron cinco godos.