Inicialmente, en la época arcaica, el interés de los griegos por los astros se debía a su utilidad para la orientación durante la navegación o para establecer pautas cronológicas.Por otra parte, también realizaron catálogos de las constelaciones, cuyas formas asociaron a objetos y seres míticos.En la Odisea, Homero describe cómo las estrellas pueden utilizarse para orientarse y servir de guía en la navegación.Afirmaban que muchas estrellas caían al Océano y desaparecían, mientras otras eran siempre visibles.[4] Filolao, principal referente conocido del sistema astronómico pitagórico, describía al cosmos con estrellas, planetas, el Sol, la Luna, la Tierra y Antichton, que giraban alrededor de un fuego central.Sin embargo, ciertos astros visibles en el firmamento nocturno, si bien se movían en conjunto con las estrellas, parecían hacerlo con menor velocidad (movimiento directo).Aunque Ptolomeo afirmaba ser su observador, muchas evidencias apuntan a Hiparco como su verdadero autor.La palabra planeta viene de término griego πλανήτης, planētēs, que significa errante.Sin embargo, ante la falta de acuerdo para hacer coincidir el año lunar con el solar, que requería intercalar un mes adicional o algunos días cada cierto tiempo, no había un calendario común para todos los griegos, sino que las ciudades adoptaron diferentes calendarios.