Asimismo, materiales usados para ilustrar educación sexual pueden ser percibidos por otras personas como inapropiadamente eróticos.
[2] Otros autores, entre ellos los filósofos Matthew Kieran [3]y Hans Maes,[4][5] han argumentado que hacer una distinción estricta entre arte erótico y pornografía es imposible.
[9]En las ilustraciones los hombres aparecen «desaliñados, calvos, bajos y barrigones» con genitales exageradamente grandes,[10] muy diferentes a los estándares egipcios de atractivo físico.
En algunas escenas, sostienen en sus manos elementos tradicionalmente asociados con Hathor, la diosa egipcia del amor, tales como flores de loto, monos o instrumentos musicales sagrados llamados sistros.
[8][10] El rollo fue probablemente pintado en el período ramésida (1292-1075 a. C.) [9]y su alta calidad artística sugiere que fue hecho para un público adinerado.
[11] Hay una galería entera dedicada a la cerámica erótica precolombina (cultura Moche) en el Museo Larco en Lima.
Edward Perry Warren, fascinado por el arte griego durante la universidad, se dedicó a coleccionar piezas de arte erótico griego que a menudo representaban relaciones sexuales homosexuales, como la Copa Warren, una copa grecorromana en la que aparecen escenas de sexo anal entre hombres.
[12] El califa omeya Walid II, que regentó el imperio árabe islámico en el siglo VIII, fue un gran mecenas del arte erótico.
No obstante, el shunga encontró oposición alrededor de 1700 y fue prohibido en Japón, si bien su circulación continuó.
[17] En la India, apareció el famoso Kama Sutra, un antiguo manual sexual que todavía se lee popularmente en todo el mundo.
Un gabinete erótico, encomendado por Catalina la Grande, parece haber estado adyacente a sus habitaciones en el Palacio de Gátchina.
Se sabe que dos oficiales de la Wehrmacht vieron las habitaciones y los muebles en 1941, pero al parecer han desaparecido desde entonces.
[21] La tradición del arte erótico fue continuada por otros pintores más modernos, como Fragonard, Courbet, Millet, Balthus, Picasso, Degas, Toulouse-Lautrec o Egon Schiele.
Para los surrealistas, lo erótico se convirtió en una manera de explorar ideas sobre la fantasía, el inconsciente oel estado onírico.
[23] Artistas como Paul Delvaux, Giorgio de Chirico o Max Ernst fueron surrealistas muy célebres que abordaron directamente lo erótico.
Artistas como el británico Stanley Spencer lideraron esta aproximación reapropiada de la figura humana en Gran Bretaña, con autorretratos desnudos junto con su segunda esposa en escenarios eróticos.
Las fotografías de Wilke, por ejemplo, satirizaban la cosificación masiva del cuerpo femenino en la pornografía y la publicidad.
[26] La aceptación y popularidad del arte erótico ha impulsado el género a la cultura popular masiva, creando muchos íconos famosos.
El Guild of Erotic Artists (Gremio de artistas eróticos) fue fundado en 2002 para reunir a un grupo de personas con ideas afines cuyo único propósito era expresarse a sí mismos y promover el arte sensual del erotismo para la era moderna.
A los censores, que se esforzaban, cuando no era posible destruir las obras de arte erótico, al menos por limitar su difusión, se oponían los coleccionistas de arte erótico, que intentaban dar un hogar a las obras perseguidas.
Transmitiendo la opinión del tribunal, Warren Burger, presidente del Tribunal Supremo, señaló que:Los lineamientos básicos para quien juzga los hechos deben ser: (a) si 'una persona promedio, aplicando los estándares comunitarios contemporáneos' encontraría que la obra, como un todo, apela al interés lascivo, (b) si la obra representa o describe, de una manera patentemente ofensiva, conductas sexuales específicamente definidas por la ley estatal aplicable; y (c) si la obra, como un todo, carece de valor literario, artístico, político o científico serio.