[3] En Alcestes se puede apreciar hasta qué punto llegó la gran adulteración de la ópera durante la época barroca.
A petición del rey Luis XIV, las repeticiones de Alcestes tuvieron lugar en Versalles.
No se les escapó ni un aplauso en toda la velada y nada elogiosas fueron las críticas al día siguiente.
Le ayudan también otras fuerzas sobrenaturales, entre ellas el dios de los vientos: Eolo.
Apolo accede a permitir que Admeto siga vivo si alguien lo sustituye.