Íñigo Ortés de Velasco

Tuvieron cuatro hijos: María Josefa,[8]​ Francisco Javier[9]​ –IV marqués de la Alameda–, Carmen[10]​ y Ramón Ortés de Velasco y Urbina.[16]​ Su intervención en la gestión pública la inició muy joven, cuando las tropas napoleónicas cercaron en 1808 la ciudad de Orduña.Asimismo añade que en las apariciones públicas aparecían junto al rey Íñigo Ortés de Velasco y Fausto de Otazu, personajes distinguidos por su liberalismo durante el Trienio y que volvieron a recuperar la representación de las instituciones públicas Vitoria y Álava.Asimismo el historiador Joseba Agirreazkuenaga asegura que durante el trienio 1830-1832 ocupó el puesto de teniente de diputado siendo diputado general Diego Arriola.Para el siguiente trienio Íñigo Ortés de Velasco fue elegido diputado general.Sin embargo, el legítimo diputado general, Íñigo Ortés de Velasco, resistió manteniéndose en su puesto, dirigiéndose a Verástegui en estos términos: “en mi poder no hay disposición, la menor, para tomar otro partido que el de procurar por el orden público, puesto que la fuerza es toda del señor don Valentín de Verastegui, […] espero que la prudencia de V.S.En estas circunstancias, convocó el diputado general junta particular en la que decidieron resistir pero salvando la tranquilidad y el orden interior de la ciudad y le manifestaron a Verástegui su actuación antiforal.En la Junta Ordinaria del 18 de noviembre de 1833, dispersados los naturales armados por la intervención del ejército liberal de Sarsfield, la Diputación general y la Junta Particular lograron la debida autorización para ejercer las más amplias facultades, ya que el clima bélico no cesaba.En esta ciudad se incorporó al grupo de la nobleza vasca exiliada.En términos ideológicos pregonaba la superación de las divisiones partidarias y su sublimación en una lectura liberal del fuerismo, común a todos los alaveses y vascos.Ante el fracaso se vio obligado a huir y exiliarse en 1841.