Ventas de Zafarraya

Una vez que esta población fue ocupada por los cristianos y no repoblada, los municipios de Alhama de Granada y Vélez-Málaga se disputaron durante siglos las tierras del Llano por su riqueza ganadera dedicada exclusivamente al pastoreo.

En 1835, superando la población de cien vecinos se inicia la segregación del núcleo de Calar del Rey, al que pertenecían.

Al nombre del pueblo se le acortó la palabra Llano para que no fuera muy largo, ya que el nombre completo sería Ventas del Llano de Zafarraya (topónimo de origen árabe "Manzil Fahs Rayya"), los otros núcleos de población en esa fecha eran El Almendral, Pilas de Algaida y Zafarraya.

La reconstrucción del pueblo se hizo casi íntegramente con dinero procedente de la entonces provincia española de Cuba, por lo que en años sucesivos el pueblo pasó a llamarse Nueva Habana.

[1]​ Actualmente, la villa experimenta un crecimiento poblacional notable gracias a su estratégica ubicación entre el Poniente Granadino y la Axarquía Malagueña y a la fertilidad de sus tierras, con cultivos de hortalizas fuera de temporada.

Antigua estación de Ventas de Zafarraya