En anatomía, una vena es un vaso sanguíneo que conduce la sangre desde los capilares hasta el corazón.Sin embargo, hay venas que contienen sangre rica en oxígeno: este es el caso de las venas pulmonares (dos izquierdas y dos derechas), que llevan sangre oxigenada desde los pulmones hasta las cavidades del lado izquierdo del corazón.Las venas son vasos de alta capacidad, que contienen un gran porcentaje del volumen sanguíneo total.El cuerpo humano posee más venas que arterias y su localización exacta es mucho más variable de persona a persona que el de las arterias a las cuales acompañan.Las venas más pequeñas se denominan vénulas postcapilares son microscópicas, y forman el sector pos-capilar de la microcirculación.La pared de las venas se describe como formada por tres capas denominadas túnicas.[3] [4] En las extremidades inferiores esto también se ve favorecido por bombas musculares, también conocidas como bombas venosas que ejercen presión sobre las venas intramusculares cuando se contraen e impulsan la sangre de vuelta al corazón.Las capas conocidas como túnica tienen una disposición concéntrica que conforman la pared del vaso.El sistema venoso suele ser asimétrico, y aunque las venas principales mantienen una posición relativamente constante, a diferencia de las arterias, la localización precisa de las venas varía entre individuos.Las grandes arterias como la aorta torácica, la subclavia, la femoral y la poplítea se encuentran cerca de una única vena que drena la misma región.Las vénulas postcapilares son demasiado pequeñas para tener una capa de músculo liso y en su lugar están sostenidas por pericitos que las envuelven.[10] Las venas cavas entran en el atrium derecho del corazón desde arriba y desde abajo.[11] Las venas superficiales son las que están más cerca de la superficie del cuerpo y no tienen arterias correspondientes.Normalmente, cada vena está asociada con una arteria, a menudo con el mismo nombre (aunque a veces hay diferencias: por ejemplo, las arterias carótidas están asociadas con las venas yugulares).Las arterias y las venas presentan varias características diferenciales, en cuanto al transporte de sustancias.Mientras que el oxígeno se transporta de dos maneras (el 98 % unido a hemoglobina y solo el 2 % disuelto), el CO2 se transporta bien unido a la hemoglobina (30 %), bien en forma de bicarbonato (70 %), bien disuelto (10 %).En los eritrocitos, el bicarbonato se transforma en agua y CO2, en una reacción catalizada por la anhidrasa carbónica.Es decir, como todo organismo vivo (con algunas excepciones), expulsamos CO2 al medio, que se generó en las mitocondrias como resultado del metabolismo celular.La eliminación de estos compuestos es fundamental para el equilibrio del organismo, y si no se eliminan adecuadamente pueden generar problemas: así, una acumulación de CO2 (porque hay una hipoventilación, por ejemplo) puede producir una acidosis.
Se muestran las capas de la pared venosa en comparación con la pared arterial
Vena con bombeo muscular.
Vena acompañante (arriba)
e =
endotelio,
m =
túnica media o muscular. Arteria (abajo).