El fútbol femenino en la Argentina está a la sombra del de los hombres en términos de desarrollo del juego, apoyo gubernamental y social, cobertura, visibilización, economía y sobre todo, en habilidad.
En esa ocasión, el Club Atlético Lanús cedió su localía con el objetivo de lograr una mayor visibilización para la disciplina.
A pesar de ello, es considerado un desempeño positivo ya que desde la creación de la copa mundial en 1991 nunca se había clasificado para disputarlas, siendo después del conjunto brasileño la segunda selección sudamericana en tener historia en la máxima competencia mundialista.
Después de un notorio bajón a partir de 2010, donde no logró clasificarse para la Copa del Mundo ni los Juegos Olímpicos, y haciendo una pobre actuación en los Juegos Panamericanos 2011, el equipo volvió a jugar en los Juegos Suramericanos de 2014, perdiendo 1-0 el primer partido contra Chile, aunque se repuso goleando 4-0 a Bolivia y avanzó a las semifinales en donde lograron un triunfo ante Brasil en los penales después de un empate 0-0.
Al final, el equipo ganó la medalla de oro al derrotar por 2-1 a Chile, por lo que el equipo argentino volvió a alzarse con un torneo después de muchos años.
[18] Renunció a la selección por confrontamientos con la Asociación del Fútbol Argentino (AFA).