Al término del campeonato, el equipo que acumulaba más puntos se proclamaba campeón y ascendía, junto con el subcampeón, a Segunda División.
Los tres últimos equipos clasificados de cada grupo descendían a Tercera División.
Hoy en día hay clubes que su nombre han derivado a idiomas como catalán-valenciano-balear, euskera o gallego; pero para reflejar la realidad de la época, los nombres de los equipos aparecen tal y como se inscribieron para competir en esta temporada.
Al comenzar la temporada en 1978 aún no existían las Comunidades autónomas y por ese motivo en la sección de Equipos por grupos y regiones se hace la distribución en las regiones que existían en aquel año.
Así, en esta temporada la región de Castilla la Nueva se fragmentó entre los dos grupos.