Sebastián Ramírez de Fuenleal

A los dieciséis años se trasladó a estudiar al Colegio Mayor Santa Cruz, en donde obtuvo el grado de doctor en derecho canónico.

En 1528 se trasladó a La Española al ser nombrado obispo de Santo Domingo y presidente de su Real Audiencia.

Su celo al servicio de la Corona y su trabajo le valieron que fuese destinado para la recién creada Real Audiencia de México.

Desde su cargo intentó evitar las encomiendas vitalicias, promoviendo la libertad indígena aunque sujetos al pago de tributos y a la justicia de los corregidores.

Cesado en su cargo y enfermo, regresó a España en 1537.