René Guénon

Sus obras escritas en francés (aunque también escribió en árabe 2 artículos para la revista El Maarifâ) han sido traducidas a todas las lenguas modernas occidentales y orientales.

En sus escritos, él se propone «exponer directamente algunos aspectos de las doctrinas metafísicas orientales»[2]​ y de «adaptar estas mismas doctrinas a los lectores occidentales, [...][3]​ siendo completamente fiel a su espíritu».

Su pensamiento ha tenido una profunda influencia en gran variedad de autores, entre los que se encuentran Mircea Eliade, Julius Evola, Antonin Artaud, Raymond Queneau, Simone Weil, Vicente Risco[4]​, Sánchez Dragó o André Breton.

Sin embargo, en 1906 aproximadamente interrumpe sus estudios universitarios a causa de su salud ―que según parece ya era bastante delicada desde la infancia―.

En el ínterin, se había establecido en la calle Saint-Louis-en-l’Ile n.º 51, domicilio que mantuvo por varios años.

Siempre en este mismo período se produce la formación de una «Orden del Templo», dirigida por Guénon; esta organización tendrá una vida breve, pero costará a su fundador el ser excluido de todos los grupos dirigidos por Papus.

El 11 de julio del mismo año René Guénon se casa en Blois con la Srta.

A los años 1913-1914 se remonta su encuentro con un hinduista, Swami Nárad Mani, quien le procura una documentación sobre la «Sociedad Teosófica» que le servirá probablemente, en parte, para la redacción del estudio sobre la organización en cuestión.

Guénon explicó que su propósito no era describir todos los aspectos del hinduismo, sino dar la base intelectual necesaria para una correcta comprensión de su esencia.

Durante su larga estancia en Egipto, René Guénon llevó una vida austera y sencilla, totalmente dedicado a sus escritos.

[9]​ Su obra escrita se puede dividir en varios bloques temáticos: Partiendo de una fuerte crítica a la sociedad occidental pueden distinguirse tres etapas cronológicas en su toma de postura respecto a la cuestión, etapas que se corresponden a su vez con las tres obras en que aborda principalmente el problema de la modernidad: René Guénon define el mundo moderno como la degeneración e inversión del mundo Tradicional.

Del mismo modo el Oriente actual, investido de pensamiento occidental, no es ya «oriental», está occidentalizado (o en otras palabras des-orientado, si tomamos el sentido simbólico y profundo del término).

René Guénon nunca negó su vinculación a la franc-masonería, en la que fue iniciado, aunque no cesó de denunciar el carácter superficial y seudoesotérico que se había instalado en la misma institución por ignorancia de su verdadera función y objetivo.

Guénon afirma que su enseñanza no se debe a un pensamiento de corte individual o personal, influenciado por alguna filosofía particular.

Entre los opositores, pueden señalarse: Otros autores aceptan parcialmente la obra de Guénon, con diferentes matices.