Panjonio
A estos miembros originales se unió más tarde Esmirna, una antigua colonia eolia ulteriormente ocupada por los jonios de Colofón.Recientemente han sido halladas dos localizaciones candidatas aunque la elección entre ambas aún no ha encontrado el necesario consenso.Aunque la ciudad fue destruida, los jonios prosiguieron dando culto en el santuario que encontraron en la vecindad, en el monte Mícala, a unos 100 km al sur de Esmirna.Homero cita en la Ilíada que sobre la cima ventosa del Mícala, el culto a Poseidón Heliconio consistía en sacrificios de toros.Todas las ceremonias sagradas y las discusiones entre los embajadores de las ciudades jonias, los próbulos, tenían lugar en este recinto.Tucídides cuenta que a finales del siglo V a. C. los jonios celebraban su festival en Éfeso.[6] Bajo Alejandro Magno los juegos y el festival retornaron al Panionio, lo que se prolongó incluso durante la dominación romana, pero sin recuperar su antiguo esplendor.Theodor Wiegand descubrió un yacimiento arqueológico a finales del siglo XIX, que fue excavado en 1958 por Kleiner, Hommel y Müller-Wiener.Ahora bien, desde 1900, el filólogo alemán Ulrich von Wilamowitz-Moellendorff indicó que el Panionio debería estar en conexión directa con los restos carios más antiguos.