En el año 1989, Argentina se encontraba en una grave crisis económica.
La inflación, alcanzó un 78,4% en mayo, mes de las elecciones presidenciales en las que se impuso el candidato del justicialista Carlos Menem.
Este plan fue elaborado por ejecutivos de Bunge & Born y fue nombrado para llevarlo adelante a Miguel Ángel Roig, quien fuera un alto ejecutivo de ese grupo agro industrial.
El 15 de ese mes, Rapanelli firmó junto a Roberto Dromi que en el marco de las privatizaciones las empresas públicas ENCoTel, Ferrocarriles Argentinos y Yacimientos Carboníferos Fiscales permanecerían cerradas a partir del 1 de enero del año siguiente.
[4] El 20 de septiembre Rapanelli informó al Congreso Nacional sobre las bases del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.