El macho tiene el rostro, la garganta y la parte superior del pecho negro.[8] Es criador residente, la hembra pone dos o tres huevos en un nido construido en un árbol, ambos sexos participan en la incubación.El canto, sonoro y oído con frecuencia, es un «crescendo» rápido y campanillado que al final se apaga, por ejemplo, «chir, chir, chir-chir-chir-chirchirchirchir-chiu-chiu-chiu-chiu»[8] La especie M. longipes fue descrita por primera vez por el naturalista británico William John Swainson en 1825 bajo el nombre científico Drymophila longipes; la localidad tipo es «“algún lugar de Brasil”, error; designado posteriormente Trinidad.»[4] El nombre genérico femenino «Myrmeciza» se compone de las palabras del griego «murmēx, murmēkos» que significa ‘hormiga’ e «izō» que significa ‘emboscada’; y el nombre de la especie «longipes», deriva del latín «longipes, longipedis» que significa ‘de pies largos’.El estudio demostró la existencia de un gran clado, con Myrmeciza longipes en la base e incluyendo al género Myrmoborus junto a Percnostola lophotes, a los géneros Gymnocichla, Pyriglena y el resto de Percnostola, a un sub-clado formado por Myrmeciza fortis, M. zeledoni y M. immaculata, separadas en el género Hafferia y al par formado por M. goeldii y M. melanoceps, separadas en el género Akletos; a este complejo grupo lo denominaron «clado longipes», dentro de una tribu Pyriglenini.[7] Según las clasificaciones del Congreso Ornitológico Internacional (IOC)[10] y Clements Checklist/eBird,[6] se reconocen cuatro subespecies, con su correspondiente distribución geográfica:[7]
Myrmeciza longipes griseipectus
macho, en
Mazagão
, Amapá, Brasil.