Maurice Merleau-Ponty

Es frecuentemente clasificado como existencialista, debido a su cercanía con Jean-Paul Sartre y Simone de Beauvoir, así como por su concepción heideggeriana del ser, aunque posteriormente, debido a su litigio con Sartre, Merleau-Ponty negaba pertenencia o acuerdo con dicha filosofía.

Comenzó a dar clases en Chartres, pero después regresó a la Escuela Normal Superior por un doctorado en letras en 1945, que consiguió con dos libros muy importantes: La estructura del comportamiento (1942) y la Fenomenología de la percepción (1945).

En contra del atomismo antes citado, Merleau-Ponty logra valiosas conclusiones apelando no solo a la fenomenología (o estudio lógico de las cosas tal cual aparecen) sino también con el gran aporte de la Teoría de la Gestalt y los descubrimientos referidos a las funciones psíquicas realizados hasta su época.

Esto es especialmente cierto cuando uno atiende los fenómenos del cuerpo (que es al mismo tiempo cuerpo-sujeto y cuerpo-objeto), a los tiempos subjetivos (la conciencia del tiempo no es ni un acto volitivo -voluntario- de conciencia ni un objeto del pensamiento) y a la conciencia que se tiene de los otros (las primeras consideraciones de los otros en Husserl llevan al solipsismo).

Husserl logra dar una base contra el solipsismo al utilizar en su método de reducción fenomenológica la tesis brentaniana: "toda conciencia es conciencia de algo" (vale reiterar: de algo externo al sujeto y al ego y consciencia del sujeto), sin embargo Husserl en su segunda etapa tiene posturas casi platónicas que apuntan a una recaída en la metafísica (el "primer Husserl" por el contrario puso sus esfuerzos en hacer de la filosofía una ciencia estricta).

Es de tal modo que Merleau-Ponty converge en gran medida con Sartre: el cuerpo humano es junto a lo externo real la base de la conciencia, y por esto se da un compromiso existencial entre el sujeto y sus circunstancias.

Sin embargo el existencialismo de Merleau-Ponty diverge en un punto crucial del existencialismo sartreano: en tanto que para Sartre la relación intersubjetiva es una relación de egos para los cuales todo otro en cuanto, desde el ego, queda reducido a la categoría de objeto, en cambio para Merleau-Ponty la cuestión resulta distinta: es precisamente esa relación existencial -y el compromiso que implica- lo que hace que todo ego deba reconocer a otro ego como un semejante y ya no solo como un objeto.

Por el contrario, dice: "mi cuerpo existe orientado hacia todas las percepciones".

Se recoge sobre sí mismo para alcanzar sus fines y el "esquema corporal" es, en última instancia, una manera de expresar que mi cuerpo está en el mundo.

Siguiendo esta vena de expresividad, examinará cómo un sujeto encarnado es capaz de realizar actividades que van más allá del nivel orgánico del cuerpo, como ocurre durante las operaciones intelectuales y en cuestiones relativas a la vida cultural.

Tumba de Merleau-Ponty en el cementerio de Père-Lachaise .
Ferdinand de Saussure