Loza fina

Loza fina o loza esmaltada se ha llamado desde el siglo XIX al conjunto de lozas de calidad superior, dirigidas a un público más selecto y por oposición a la etiqueta de loza basta reservada a la cacharrería de uso popular, ya fuera vidriada y decorada, o la loza tradicional monocroma.Los teóricos de la cerámica han acuñado a su vez el título de cerámica fina,[a]​ usado en la cultura occidental al referirse a productos de fina textura, sean loza, gres, porcelana u otro tipo de pastas de selecta elaboración.En el Reino Unido continua asociándose a las lozas fabricadas con tierra de pipa, uno de los procesos revolucionarios de los ceramistas ingleses del siglo XVIII,[1]​ en tanto que en Japón, por ejemplo, designa a la obra cerámica de alta tecnología.[2]​ En el siglo XIX, Francisco de Paula Mellado diferenciaba los siguientes tipos de loza fina o inglesa según su composición: loza fina caliza, loza fina feldespática, cream colour (loza de color crema o creamware).[d]​ En la cornisa norte española, además de Sargadelos, destacaron las ya desaparecidas de Gijón, Oviedo, Busturia, Ventas de Yanci y Pasajes (1858-1910).
Bandeja de Pisa (1727-1750), donde se sintetiza la fayenza tradicional con la decoración “chinesca” en azul. Museo de la Cerámica (Alcora) .
Fuente ochavada de loza fina de San Mamés de Busturia (1842- 1867). Blanco estannífero y negro de óxido de manganeso. Representa un paisaje con reminiscencias chinescas con dos personajes y sus mulas, motivo recurrente en esta cerámica vizcaína, conocido con el nombre de "muleros". [ 3 ]